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13 de Noviembre
La conexión de los seres humanos con los astros, es un fenómeno que se lleva observando hace miles de años, y lo podemos evidenciar con hechos tan simples como que todos los planetas llevan nombres de dioses romanos. Las civilizaciones antiguas se guiaban por los astros para establecer sus viviendas, para realizar cultivos y para nombrar muchas cosas que hoy conocemos, por ejemplo, la menstruación, que viene del griego mén (mes) y mene (luna), así que si quieres saber más de cerca de qué manera se puede relacionar tu ciclo con la luna, ¡continúa leyendo este artículo!
Como vemos en el origen de la palabra, la relación de la menstruación y la mujer con la luna no es algo nuevo ni que se esté hablando desde hace poco, es una conexión profunda que se ha observado desde hace mucho tiempo, principalmente por su naturaleza cíclica. La menstruación, al igual que la luna, pasa por 4 fases que se reparten a lo largo de 28 días, relacionándose entre sí y teniendo cada una cierta energía poderosa que se puede aprovechar a nuestro favor.
Hay diferentes puntos de vista que han llevado a los expertos a decir que sí hay una relación entre las fases de la luna y los ciclos menstruales, por ejemplo, la Universidad de Würzburg en Alemania hizo un seguimiento a 22 mujeres durante diferentes etapas del ciclo, y encontraron que es más probable que las mujeres menstrúen mientras hay luna llena, pero a su vez se vio que no todas las mujeres tienen tanta influencia sobre las fases, e incluso esta puede ir disminuyendo con la edad.
También se encontró que la exposición a la luz artificial puede afectar el ciclo menstrual y su relación con la luna, pues a mayor exposición a este tipo de luces, menor efecto de las fases lunares en el cuerpo.
Cuando sabemos cuánto tiempo dura nuestro ciclo menstrual, cuánto nos dura cada fase y cómo nos sentimos en cada una de ellas, sin duda alguna tendremos una mejor relación con nuestra menstruación, pues empezaremos a tener mayor conexión con nuestro ciclo y dejaremos a un lado las ideas o sentimientos negativos que generalmente asociamos al periodo.
Un ritual es un momento especial al cual le dedicamos cierto tiempo y espacio para manifestar un deseo que viene desde nuestro interior, ya sea pedir, agradecer o lo que se nos ocurra. Por ejemplo, escribir nuestros propósitos de año nuevo es un ritual que aprovecha la energía de una nueva vuelta al sol.
El inicio de un nuevo ciclo menstrual puede ser bastante simbólico y brindar la energía necesaria para comenzar otros ciclos, por eso, es el momento perfecto para manifestar tus propósitos, y no hay una sola manera de hacerlo.
Puedes relajarte, encender un incienso o una vela aromática, poner música que te haga vibrar alto y comenzar a escribir esos sueños que están en tu cabeza. Luego, este papel lo puedes guardar, lo puedes sembrar con una planta o lo puedes poner en un lugar donde lo veas todos los días, lo importante es que lo que escribas creyendo profundamente que sí va a suceder y trabajes por ello.
Nuestras abuelas y las mujeres que venían mucho antes de ellas tenían una conciencia muy profunda de la relación del ciclo menstrual con la naturaleza, donde no significaba tabú, sino empoderamiento; por eso, en la actualidad existen rituales ancestrales que involucran nuestra menstruación.
Uno de ellos consiste en diluir un poco de sangre en agua para regar las plantas. Este ritual es beneficioso para nuestro jardín debido a los nutrientes que esto le puede brindar, además, es una manera de seguir profundizando nuestra conexión con la tierra y la naturaleza.
Así como el inicio del periodo se puede aprovechar para abrir nuevos ciclos, el final del periodo se puede usar para cerrarlos de una manera muy similar. Crea un ambiente que te haga sentir paz y tranquilidad. Escribe sobre una hoja las cosas que agradeces, las que aprendiste y las que no quieres repetir, y, al finalizar, la puedes quemar.
El solsticio de verano es uno de los eventos astrológicos y astronómicos más importantes que suceden todos los años, este marca el inicio del verano y es el día en el que el Polo Norte está más cerca al Sol. Por esto mismo, el solsticio de verano también es el día más largo del año, acompañado de la noche más corta.
Las culturas han ido evolucionando y los rituales también, pero la energía del solsticio sigue siendo igual de poderosa, por eso, te contaremos cuándo es y qué ritual puedes hacer.
El solsticio de verano del Hemisferio Norte se da cada año entre el 20 y el 22 de junio, donde el polo norte alcanza su mayor cercanía al sol, puedes revisar según tu país a qué hora será; así que marca esta fecha en tu calendario y prepárate para usar la energía poderosa que produce este fenómeno.
Aunque el ciclo menstrual y el sol no tienen una relación directa como la del ciclo menstrual y la luna, tu periodo siempre te conectará más profundamente con tu energía femenina, por lo que tu poder para manifestar será más alto. Sin embargo, si no estás en tus días durante el solsticio de verano, no hay problema, igual puedes hacer tus rituales, lo más importante es que creas profundamente en lo que estás haciendo.
Estos son los rituales que puedes hacer para aprovechar la energía del solsticio de verano:
Saltar la hoguera:
El sol y el solsticio de verano tienen una relación directa con el fuego, así que este es el mejor día para aprovechar este elemento. Las culturas antiguas encendían grandes hogueras en las que saltaban y arrojaban ofrendas para pedir abundancia, pero como esos tiempos ya pasaron, Nosotras solo debemos encender unas cuántas velas en casa y tal vez un incienso o un palo santo para tener un ambiente más místico.
Con estas velas encendidas y una atmósfera tranquila, nos sentaremos a pensar en lo que queremos para esta nueva etapa en la tierra y en nuestra vida. Qué proyecto queremos que despegue, qué queremos que arda con intensidad: tal vez un trabajo, un emprendimiento o incluso un amor, t ú sabrás qué es lo que deseas con más intensidad y este día es perfecto para manifestar y darle paso a los nuevos comienzos.
Desintoxicación:
Una muy buena manera de recibir el solsticio de verano es hacerlo con los chakras alineados, esto hará que tus centros energéticos capten mejor la energía del solsticio, y para lograrlo, necesitas una desintoxicación. Basta con empezar a comer lo mejor posible aproximadamente 5 días antes del solsticio, de manera muy natural y consciente, evitando al máximo alimentos procesados. También puedes desintoxicar tu alma evadiendo discusiones, peleas y comentarios negativos sobre otras personas. Centra tu energía solo en ti y verás cómo tu poder aumenta.
Scripting:
Más que un ritual, esta es una técnica muy conocida en la ley de atracción, pero puede ser tan mágica y mística como tú lo desees. Consiste básicamente en escribir todo lo quieres manifestar, como si ya lo tuvieras en tus manos y te sintieras agradecida por ello. Por ejemplo, si quieres un carro, escribirás que estás muy agradecida con el carro que tienes, que te hace sentir libre y poderosa, que amas recoger a tus amigas y disfrutar la música a todo volumen, y todo lo demás que puedas llegar a imaginar.
Esto lo puedes hacer en cualquier día del año pero tendrá mucho más poder durante el solsticio.
Te recomendamos escribirlo a mano y no de manera digital para que te conectes más con lo que estás sintiendo y así tener una energía más alta.
Para lograr esto debes llevar un registro muy específico de tus ciclos. Mantén actualizado tu calendario menstrual en la V-app y ten en cuenta cómo se relaciona el primer día de tu ciclo con la fase en la que está la luna. Registra también en la app cuáles son las emociones, sensaciones y síntomas que tienes, esto te ayudará a notar un patrón que posteriormente lograrás vincular con las fases lunares.
En conclusión, la menstruación es natural, poderosa y hace parte de nuestra naturaleza femenina. Entender esto hace que nuestra relación con ella sea mucho más positiva y por eso no hay nada mejor que aprender a disfrutarla y sacarle el máximo provecho con los rituales que te compartimos a lo largo de este escrito. ¿Tu relación con la menstruación es positiva o negativa? ¿Ya habías pensado en esa conexión con la luna?
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