¿Qué hay detrás de la dismorfia corporal?

¿Críticas frecuentemente tu cuerpo y te miras constantemente al espejo para juzgarlo? ¡Así se ve la dismorfia corporal! Una situación muy incómoda que puede afectar nuestro bienestar e incluso a las personas que están a nuestro alrededor.

Es importante que conozcamos sobre ella para tratar a las personas con cariño, empatía y mucho respeto, así se sentirán acompañadas y jamás juzgadas. 

Quédate con Nosotras para que aprendamos sobre qué es la dismorfia corporal y entendamos juntas esta condición. 

¿Qué es la dismorfia corporal?

La dismorfia corporal es una condición en la que la mente hace que percibamos nuestro cuerpo diferente a cómo realmente es, ¡creando una obsesión inmensa con el espejo! Está directamente asociada con nuestros complejos, por ejemplo: “siempre he tenido miedo a subir de peso y, cuando me miro al espejo, me veo cada vez más grande”; o, al contrario, “siempre he tenido miedo a bajar de peso, pero cuando me miro al espejo me veo cada vez más pequeña”.

Es como tener una lupa gigante que solo se enfoca en lo que crees que está mal con vos, haciendo que te sintás incómoda e insegura.

¿Cuándo es más común que la dismorfia corporal aparezca?

La adolescencia es una de las etapas más difíciles de cualquier mujer, porque es el momento en el que nuestros cuerpos están teniendo grandes cambios y estamos más conscientes de cómo nos vemos y cómo nos estamos desarrollando. En esta parte de nuestras vidas enfrentamos muchos retos y esto puede hacer que nos sintamos más vulnerables a las inseguridades.

Causas de la dismorfia corporal entre las jóvenes

No existe un manual que nos enumere a detalle las causas por las que la dismorfia corporal puede aparecer, porque hay muchas variables que pueden influir; como nuestra historia personal y familiar, o la manera en la que hemos aprendido a relacionarnos con nuestro entorno, pero, sin duda, hay algunos factores que pueden llegar a considerarse de alto riesgo para padecer este trastorno, como: 

• Factores genéticos: suele ser muy común que, si alguien de la familia padece este trastorno, se pueda ver reflejado también en otras personas del círculo. 

• Recuerdos incómodos: cuando la infancia estuvo rodeada de comentarios sobre el cuerpo y con prejuicios que generaban etiquetas según la apariencia física, es probable que hayan quedado cicatrices profundas que se reflejan incluso a través del tiempo.

• Problemas de autoestima: es común que la mente se enfoque más en lo que cree que “te falta”, generando cierta obsesión e incomodidad constante con tu propio cuerpo. 

• Influencia social:  Vivimos en una sociedad en la que lucir bien se convirtió casi que en un deber, esto genera presión y complejos con un estándar de belleza inalcanzable, donde nos preguntamos constantemente ¿quién luce mejor?, ¿qué está de moda?, ¿quién es la más linda del colegio o del barrio?

Síntomas de la dismorfia corporal

Hay señales claras que, sin duda, son signo de alerta y, aunque puede haber muchos comportamientos que se normalizan con el tiempo, no son sanos ni naturales, ¡así que pon atención si tienes los siguientes hábitos!

• Pasar mucho tiempo frente al espejo, enfocándote en lo que no te gusta de tu apariencia.

• Evitar situaciones sociales por miedo a que otros noten tus "defectos".

• Sentirse inferior a las demás.

• Buscar maneras de ocultar o cambiar algunas partes de tu cuerpo.

Estas son solo algunas de las señales que debes tener en cuenta para empezar a identificar qué es lo que está sucediendo, pero sin duda existen muchas otras que, con un acompañamiento especializado con tu psicóloga de confianza, podrás comprender aún mejor tus sentimientos y tener herramientas para manejar tus preocupaciones de manera saludable.

Influencia social en la dismorfia corporal

Las redes sociales y los medios de comunicación tienen un gran impacto en cómo nos vemos a nosotras mismas, porque se ha logrado crear un estándar con el aspecto físico en el que por supuesto no todas encajamos, pero por el que sí nos juzgamos, por eso, ¡prestá atención porque vamos a romper mitos! 

¿Cómo impactan las redes sociales en la obsesión con el cuerpo?

En la era de las redes sociales, nos encontramos constantemente bombardeados de imágenes "perfectas" que, en realidad, están retocadas o filtradas antes de ser compartidas. Aunque podría parecer un acto en el que muchos hemos participado en algún momento, esto puede hacer que cada vez queramos compararnos más con estándares irreales y generar insatisfacción con nuestro propio aspecto.

Recuerda que Instagram no es la vida real y debemos aprender a ver las redes sociales como plataformas donde las personas  comparten normalmente momentos felices.

¿Qué hacer si detecto este trastorno en mí?

¡El acompañamiento es clave! Si te das cuenta de que puedes estar lidiando con la dismorfia corporal, ¡habla con tus amigos y familiares! Este es el primer paso para encontrar una solución a largo plazo tomando los siguientes consejos que Nosotras te damos: 

Evita compararte

Todas somos únicas y especiales a nuestra manera. En lugar de compararte, concentráte en lo que te hace feliz, en las cualidades que te representan y en las particularidades que te hacen hermosa e increíble.

Disminuye el uso de filtros en tus redes sociales

Los filtros en las redes sociales suelen alterar nuestro aspecto natural, porque al usarlos modifican las facciones y cambian ciertos rasgos del rostro y el cuerpo; sin duda, ¡son un arma de doble filo! Celebra tu propia belleza y ámate al natural.

Trabaja en tu autoestima

Realiza actividades que te hagan sentir bien, empieza a implementar algunos hábitos saludables como: practicar algún deporte, meditar, salir con tus amigas y aprender cosas nuevas. ¡Haz que crezca tu amor propio y celebra la vida!

Habla con alguien que sea cercano a ti

Compartir tus sentimientos con personas de confianza, siempre será buena idea. No guardes en tu interior pensamientos negativos y deja que salgan para que se transformen.

¿Cómo ayudar a alguien con trastorno dismórfico corporal?

¿Sabías que tú puedes marcar la diferencia en este proceso? Si piensas que alguien cercano podría estar enfrentando la dismorfia corporal, aquí te dejamos algunos tips para acompañar desde el corazón, con empatía y un respaldo positivo:

• Escucha y apoya sin juzgar: Habla con tu mejor amiga sin criticarla y dale una mano en los momentos difíciles.

• Anima a esa persona para que busque ayuda profesional.

• Recuérdale sus cualidades y talentos únicos: ayúdala a vear todo lo increíble que es.

• Evita comentarios sobre su cuerpo: nunca es necesario hablar sobre la apariencia física de los demás.

¡Recuerda que somos mucho más que nuestro aspecto exterior! La verdadera belleza radica en aceptarnos y amar nuestras diferencias. ¡Juntas somos más fuertes!